By the way...

Y las cosas efímeras parecen estar cazando mi destino.

Dentro de las aventuras alarmantes que vivo al transcurrir los días en este país que cada vez más va quedando sin sabor, me amarro de la locura momentánea.

Muy bien dijo San Agustín, “Una vez al año es lícito hacer locuras”. Lo apoyo y lo practico, pero… un poco más de una vez. De manera lícita… creo.

Así que con sólo tres gotas de juicio en la cabeza me atrevo a cruzar estas tierras.

Y el velón extranjero se apagó en semanas de confusión provocada por mis propias acciones. Dejé algunas historias sin explicación alguna… dejé la impresión de mi atolondrada actitud ante las situaciones difíciles.

Ambigua fue mi acción, no su constante decir.
Sin ser mi intención, me sumergí en lo que no quise. Pero salí ilesa y pido disculpas.

Anécdotas pesadas, pero aun así se huele un aire ligero.

Un tira y jala: ¿quién fue? ¿Quién dijo qué? ¿Por qué?
No me pregunten que no voy a juzgar al que lo hizo, ni al que lo dijo, ni por qué… yo misma hago demasiado, digo mucho y tengo mis propias razones.

Hace algunos años era una extraña a la que no extraño. No me encanto, pero por fin sé calmar mi autorencor.

Sigo en la búsqueda, que dentro de muy poco se convertirá en caza, de encontrarme y amarme en lo que haga y deje de hacer.

Por ahora seguiré cantando... un cigarrillo por favor?...

" I'm not afraid
Of anything in this world
There's nothing you can throw at me
That I haven't already heard
I'm just trynna' find
A decent melody
A song that I can sing
In my own company

...I will not forsake
The colors that you brought
The nights you filled with fireworks

...It's just a moment
This time will pass..."